China celebra éxito de Cumbre de G20

El presidente Xi Jinping advirtió que los países en desarrollo y emergentes han visto afectada la estabilidad y el crecimiento de sus economías

El presidente de China, Xi Jinping, celebró hoy el éxito de la Cumbre del G20 de Buenos Aires, después de la tregua de la guerra comercial que selló con el mandatario de Estados Unidos, Donald Trump.

“China felicita la exitosa realización de la Cumbre. China y Argentina, frente al intrincado panorama mundial, deben hacer valer el espíritu del G20 en defensa del multilateralismo y el libre comercio para construir una economía mundial abierta y fomentar la prosperidad y estabilidad en todo el mundo”, señaló.

Al término de la reunión bilateral que sostuvo esta mañana con el presidente argentino Mauricio Macri, Xi aseguró que “la economía china es muy resiliente aunque cada vez existe más incertidumbre en lo internacional”.

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También recordó que el país asiático conmemorará los 40 años de un proceso de reforma y apertura que ha sido muy llamativo para el resto del mundo y que ahora incluye la meta de eliminar por completo la pobreza en el año 2020.

El presidente advirtió que los países en desarrollo y emergentes han visto afectada la estabilidad y el crecimiento de sus economías, por lo que América Latina y el Caribe, en particular, enfrentan una serie de desafíos.

Sin embargo, confió en que “esta región tiene plena sabiduría para alcanzar paz, estabilidad, desarrollo y revitalización mediante sus propios medios”.

Durante el encuentro con Macri, ambos jefes de Estado firmaron más de 30 convenios que reforzaron la relación política, económica y cultural entre los dos países.

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En su declaración frente a la prensa, Xi evitó alusión alguna a la reunión que sostuvo la víspera con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con quien acordó una tregua en la guerra comercial que han protagonizado este año y que ha afectado a la economía global.

Los mandatarios cenaron en uno de los hoteles más lujosos de Buenos Aires poco después de que terminara la Cumbre del G20 en la que participaron y que concluyó con un documento de consenso que defendió el multilateralismo e impulsó una reforma de la Organización Mundial del Comercio.

Este año, Trump comenzó a aplicar un 25 por ciento de aranceles a productos chinos con el argumento de que el país asiático tenía prácticas comerciales desleales y de combatir el déficit comercial de Estados Unidos con ese país, pero luego amplió la lista de mercancías afectadas con nuevos impuestos.

El gobierno de Xi lo acusó de haber iniciado la guerra comercial más grande de la historia y respondió con la imposición de aranceles a productos estadunidenses.

Como Estados Unidos y China representan a las economías más grandes del mundo, la escalada en la tensión comercial afectó a los mercados globales, por lo que la presencia de ambos en el G20 y el anuncio de su encuentro generó amplias expectativas.

Después de la cita, que terminó con aplausos de ambas delegaciones, la Casa Blanca aseguró en un comunicado que Estados Unidos mantendrá las actuales tarifas del 10 por ciento a una serie de productos chinos a los que había amenazado con incrementar los aranceles a un 25 por ciento a partir del 1 de enero.

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Agregó que China, por su parte, se comprometió a comprar una cantidad sustancial, pero todavía no definida, de productos industriales, agrícolas y energéticos estadunidenses para reducir el desequilibrio comercial entre los dos países.

La tensión no desapareció del todo, ya que el comunicado de la Casa Blanca advirtió que si los cambios en el intercambio comercial no se producen en un lapso de 90 días, entonces sí aumentará en un 25 por ciento los aranceles a una serie de productos chinos.