Da Ejército Mexicano un toque femenino al Plan DN-III-E

A unos días del aniversario de esta estrategia militar, dos mujeres hablan de su labor por México en momentos de desastre natural

Alhelí Lara / La Jefa (texto) – Yarhim Jiménez / Inquieto (fotos)

El Plan DN-III-E está por cumplir 55 años de brindar auxilio a la población en zonas de desastre y las mujeres del Ejército Mexicano han jugado un papel fundamental en esta planeación estratégico-militar.

A unos días del aniversario de este Plan, ‘La Jefa y sus Inquietos’ acudieron a la Zona Militar 17 de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), en Querétaro, para conocer a dos mujeres que han formado parte de las acciones del Gobierno mexicano para apoyar a la población civil en los momentos más duros y sensibles, como son los huracanes y los terremotos.

La mayor Cabrera, quien lleva 19 años de servicio y ha formado parte de los equipos de atención en terremotos de la Ciudad de México como el de 2017, y actualmente se desempeña como la coordinadora estatal de vacunación contra la COVID-19 en el Estado, nos platicó que el DN-III forma parte del plan de defensa nacional, en su versión III y cuya E significa ‘de auxilio a la población’.

“A veces nos enfrentamos a situaciones muy fuertes, pero la población nos necesita. Ahí tenemos que mostrar el carácter y eso es parte de nuestra formación. Yo quería ser médico militar y la verdad no me arrepiento; ha sido muy gratificante”.

La soldado Maribel, por su parte, tuvo una destacada participación en el Plan DN-III aplicado en Tabasco, tras el impacto del huracán Eta en 2020. A pesar de tener poco tiempo en el Ejército –apenas poco más de dos años y medio-, impulsa con gran compromiso labores de apoyo y rescate para la población civil.

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“Me motivó ver la labor de otras compañeras. Ahora creo que lo más difícil que me ha tocado ver es la contingencia por la COVID-19. Fue algo muy impactante ver a tanta gente (sufrir), a las mujeres, a mi mayor, que estaba cumpliendo en el área COVID-19, que estaba de arriba hacia abajo, y poder ayudar a los compañeros, que muchos se enfermaron”, nos comentó mientras recorríamos parte de las instalaciones.

¿Las soldados también lloran? ¿Cómo controlan sus emociones frente a una tragedia? Maribel nos platicó que “hay que poner la cara en alto y no demostrar a las personas que estás triste. En ese momento debes ser fuerte, vencer la tristeza, que no te gane la nostalgia”.

El orgullo de las mujeres que laboran en la Sedena está en servir al país, y la satisfacción, coinciden, en el reconocimiento que les dan los ciudadanos. Por ello, lanzan al unísono una frase que eriza la piel: “¡Cada día, cada soldado, por cada mexicano!”.

Para conocer más sobre la historia de estas mujeres que dan su vida por México, no dejes de ver a La jefa y sus inquietos por aldialogo.mx, el canal de YouTube y las diversas plataformas digitales.