Las penalizaciones serán más estrictas con las personas reincidentes que hayan acumulado cinco o más infracciones, y con quienes conduzcan vehículos de placas foráneas que hayan cometido cualquier infracción.

Serán remitidos a depósitos vehiculares en los que, además de cumplir con sanción económica correspondiente a la falta actual, tendrán que cubrir todas las multas que adeuden a la ciudad. Es importante precisar que el criterio de reincidencia entrará en vigor a partir del 15 de marzo.

Otra modificación es evitar la discrecionalidad en las sanciones aplicadas a posibles infractores de acuerdo con el tabulador ya existente al día de hoy. Aunque el monto de las sanciones actuales no aumenta, este cambio deja fuera el criterio de los policías para establecer el monto del pago por las faltas al Reglamento de Tránsito.

Alcoholímetro

La tercera medida tiene que ver con el Programa Conduce Sin Alcohol, mejor conocido como Alcoholímetro, con la que se endurecen las medidas que garanticen el cumplimiento de sanciones para los conductores que excedan los niveles permitidos de alcohol en la sangre.

A partir de ahora, los vehículos de los infractores de este programa serán llevados automáticamente al depósito vehicular, sin la posibilidad de que un acompañante pueda llevarse la unidad, que será devuelta hasta que la persona sancionada cumpla su penalización en el Centro de Sanciones Administrativas y de Integración Social, “El Torito”.

Además, el vehículo en depósito, tendrá que cubrir las multas pendientes con la ciudad para ser liberado.

Con esta disposición, se faculta al personal operativo para que pueda hacer la revisión documental completa del vehículo y, en su caso, infraccionar al o la conductora en caso de que no porte todos los papeles requeridos para manejar el automóvil.

Para garantizar la correcta operación, en cada punto de revisión del Alcoholímetro se fortalecerá la presencia de los policías de la SSC, así como la incorporación de más grúas para los arrastres necesarios.

Medidas contra COVID-19

Cabe señalar que se han implementado ajustes y mejoras para actualizar y profesionalizar el Programa Conduce Sin Alcohol. Como ejemplo, se reforzó en un 30 por ciento el estado de fuerza, de acuerdo con los protocolos y medidas sanitarias requeridas por el virus COVID-19.

También ahora se utiliza el equipo “Alcostop”, que permite detectar los niveles de alcohol en el ambiente, de tal manera que el policía hace uso de la sana distancia sin comprometer al conductor y su persona y, dependiendo de los resultados, podrá continuar con la entrevista y la prueba de alcoholemia de ser el caso.

La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) señaló que con estas reformas se avanza en los compromisos en materia de seguridad vial para peatones, automovilistas, motociclistas, ciclistas y demás formas de movilidad, endureciendo las medidas de cumplimiento de sanciones para quienes no respeten el Reglamento de Tránsito y, así, abatir la impunidad sin aumentar las sanciones.

Con información de Excélsior