México, con baja cobertura en educación superior  

En los últimos 17 años, el país incorporó a sus aulas a estudiantes de para Técnico Superior Universitario y de nivel Licenciatura, lo cual representa una matrícula de poco más de 4-.2 millones de habitantes

Ana Morales

El estudiar la universidad es considerado como la culminación y el epítome de los años destinados a la educación. Comenzando con el preescolar, pasando por la educación básica –primaria y secundaria–, el bachillerato, hasta llegar a una licenciatura o una carrera para ser Técnico Superior Universitario (TSU).

Parte de esta preparación se realiza en las universidades públicas. Estas –junto con otras instituciones de educación superior– se incluyen en la Asociación Nacional de Universidades de Educación Superior (ANUIES), institución encargada de la coordinación de las distintas universidades y planes de desarrollo institucional.

Actualmente, la ANUIES se comprende por 180 instituciones de educación superior, entre universidades públicas, institutos tecnológicos y universidades privadas.

A pesar de lo anterior, y de que las instituciones con mayor prestigio del país forman parte de dicha asociación, este número es bajo comparado con las casi 3 mil instituciones de educación superior pública y privada que existen en el país.

Para la ANUIES, en los últimos 17 años, México incorporó a sus aulas a estudiantes de para Técnico Superior Universitario y de nivel Licenciatura, lo cual representa una matrícula de poco más de 4.2 millones de habitantes. Lo anterior equivale a una Tasa Bruta de Cobertura (TBC, indicador que mide la proporción de la matrícula total de un nivel educativo determinado respecto a la población en edad oficial de cursar ese nivel) de 38.4 por ciento, en 2016.

Sin embargo, de acuerdo con la institución, los niveles de cobertura de educación superior de México no son tan alarmantes si se tiene en cuenta el TBC promedio a nivel mundial es de 36.8 por ciento. Si se tomaran en cuenta estos datos, el TBC nacional es mayor del promedio. Sin embargo, es necesario considerar que la Tasa de Bruta de Cobertura del país resulta baja si se compara con el TBC de la región que incluye a Latinoamérica y el Caribe, de 48.4 por ciento; o si se compara con el TBC promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), de la que México forma parte y tiene una cobertura de 73.8 por ciento.

CAUSAS

La baja cobertura de la educación superior en México tiene diferentes causas y consecuencias. Dentro de estas, la más alarmante es la gran cantidad de estudiantes rechazados o que no tienen las condiciones necesarias para acceder –por examen o por cuestiones económicas, a instituciones privadas– a la educación superior.

Existen diversos factores, como los recursos con los que cuentan los interesados, las limitadas universidades públicas existentes y la infraestructura con las que disponen. En este último aspecto, de acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación 2018, los recursos destinados a la educación pública disminuyeron 0.5 por ciento.

Ante este panorama, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) mencionó que el financiamiento y la gratuidad “a ciegas” de la educación superior es un peligro presupuestal y pone en riesgo distintas instituciones públicas.

De acuerdo con el organismo, deben revisarse distintas posibilidades, entre las que se encuentra el otorgamiento de becas a universidades privadas, por parte de los distintos gobiernos, y el establecimiento –o incremento– de cuotas parciales de recuperación en las universidades públicas.

Según ANUIES, en 2014, el costo anual por estudiantes de educación superior, en instituciones públicas de México, era de 9 mil 754 dólares, mientras que el promedio de los distintos países miembros de la OCDE era de 16 mil 465.

SITUACIÓN EN QUERÉTARO

En Querétaro, el problema del presupuesto necesario generó distintos conflictos. El más reciente se produjo hace dos años, cuando el otrora rector de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) Gilberto Herrera Ruiz, realizó el informe de su rectoría frente al Palacio de la Rectoría, donde, junto con distintos estudiantes, académicos y población en general, denunció los pocos recursos con que contaba la universidad y exigió un presupuesto justo al gobernador Francisco Domínguez Servien.

Pese a la denuncia, el Consejo Universitario de la UAQ argumentó, en su momento, que dicha institución contaba con una situación financiera sana, de acuerdo a las disposiciones legales aplicables a los postulados básicos de la contabilidad gubernamental.

De acuerdo con la ANUIES, las instituciones queretanas de educación superior afiliadas a ella son la Universidad Autónoma de Querétaro , el Instituto Tecnológico de Querétaro y la Universidad Tecnológica de Querétaro.

Según el Decreto de Egresos del Estado de Querétaro para el ejercicio fiscal 2018, los recursos para la UAQ será de 613 millones 621 mil 580 pesos, mientras que para la Universidad Tecnológica del estado será de 155 millones 685 mil 292pesos.