“A mi hijo lo quemaron en la escuela, le echaron alcohol en la banca y, (…) al momento en el que él sintió mojado se paró y el otro niño traía un encendedor y lo quemó. Ese niño traía su suéter y estaba apagando el fuego, pero ya no se pudo apagar”, manifestó la madre de Juan, un estudiante que sufrió quemaduras dentro de la telesecundaria El Salitre.
Fue el pasado 6 de Junio cuando se dio a conocer la noticia de que Juan había sufrido quemaduras dentro del salón de clases. A partir de ahí, ha tenido que recibir atención médica en diferentes instituciones. Actualmente, se encuentra hospitalizado en el Hospital del Niño y la Mujer en donde le serán colocados dos injertos de piel.
“A mí me da tristeza verlo cómo él sufre porque él dice que duele (…) Ahorita camina poquito, pero no mucho porque dice que si camina le duele, por eso casi no quiere caminar”, manifestó.
Para la recuperación de Juan, se espera que después la colocación de los dos injertos, tendrá que estar 8 días más en el Hospital del Niño y la Mujer y a partir de ahí seguir un tratamiento para su recuperación.
“Ahorita, está un poco tranquilo, porque toda la gente le manda cartas que le eche ganas y que salga adelante” manifestó la madre del menor.
Foto: Estrella Álvarez
Por su parte, el abogado del caso, Fabián García mencionó que hasta el momento los gastos que han tenido que solventar los padres de Juan son de un aproximado de 30 mil pesos, sin embargo, esperan que al salir del hospital podría incrementar la cuenta.
Ante esto, el especialista en Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva, Jaime Álvarez destacó que el costo de estos procedimientos es alto porque los recursos que se necesitan para la curación de una persona son costosos, el cual va desde la valoración en urgencias, hospitalización, lavados quirúrgicos y apósitos para limpiar las heridas.
Después de que Juan sufrió la quemadura, el especialista explicó que los doctores tuvieron que realizar un diagnóstico para identificar la causa y el elemento con el que sufrió la quemadura.
Destacó que, en esta etapa, se tiene que evaluar el cuadro clínico y los estados hídricos del paciente, con la finalidad de conocer la cantidad de líquido que perdió su cuerpo y poder reponerlo, ya que podría haber sufrido un daño en los riñones, en la respiración o en la circulación.
Explicó que, después de esto se tienen que tratar las heridas, dependiendo de la gravedad, ya que pueden ser de primero hasta tercer grado. En algunos casos, para controlarlas se realiza un aseo quirúrgico para delimitar la lesión, ya sea con algún fomento, parche quirúrgico o hasta con un injerto de piel.
Los padres del joven lesionado con su abogada. / Foto: Víctor Xochipa
La colocación de un injerto de piel va a depender del tamaño y profundidad de la lesión, por lo que, destacó que será fundamental evaluar la cantidad de piel que se perdió y en consecuencia determinar su colocación.
El especialista en Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva manifestó que el tiempo que tarda en cicatrizar un injerto es de 8 a 15 días, pero esto puede variar según el tipo de lesión, la profundidad, el tipo de injerto y el cuidado que tiene que tomar en cuenta el paciente.
Mientras tanto, el periodo de recuperación de un paciente que ha sufrido quemaduras es de un aproximado de 3 semanas, además de los cuidados que debe realizar como el reposo, disminución de la actividad física, entre otros.
“No puede hacer deporte, no puede manejar, caminar largas distancias. Conforme se va reintegrando el injerto, el paciente se va a reincorporando a sus actividades normales”, explicó.
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