Gallos Blancos, 70 años de pasión y resistencia

Gallos Blancos de Querétaro tiene una historia de vida e identidad hecha en la ciudad gracias a futbolistas y aficionados

Francisco Pérez

Gallos Blancos ha sido defendido por afortunados que llevan  la Q en el pecho y se han enfundado en sus colores. Un día como hoy hace 70 años nació el mito de un equipo profesional para Querétaro.

Gallos Blancos de Querétaro podría ser el título de una historia que da vida e identidad a Querétaro. El equipo profesional de balompié ha navegado en diferentes aguas a lo largo de 70 años. Generaciones de queretanos han nacido y crecido, han modificado los usos y costumbres del estado y han coexistido con un equipo de futbol que usualmente da más preocupaciones que alegrías a sus fanáticos. Una historia de amor y resistencia que a flechado a miles de aficionados en siete décadas.

El equipo queretano ha sido un ejemplo de vida y de resistir demasiados golpes que le ha dado la vida. Una mezcla de franquicias y de administraciones que han exprimido la pasión de un pueblo futbolero a lo largo de 70 años, mismos en los que el mote de Gallos Blancos ha aguantado todos los devenires, lo mismo que la Q que abriga el corazón de una fanaticada experta en el sufrimiento. Así es como se ha forjado la leyenda del equipo de los queretanos.

UN POCO DE HISTORIA

1950 fue el año que un grupo de jóvenes obreros de la creciente capital de Querétaro tomaron la invitación de la Federación Mexicana de Futbol para darle más vida a la Segunda División Profesional. De las fábricas de la pequeña urbe salieron los primeros héroes locales. El equipo ‘Piratas’ fue la base de un conjunto que rompería las barreras del tiempo.

La familia Niembro prestó parte de sus bienes para la fundación de este equipo. En su tienda de ropa, ubicada en el Centro Histórico de la ciudad, inició la logística para formar el equipo profesional de Querétaro. Alfonso ‘Pachin’ Niembro fue el pilar sobre el que se erigió el Querétaro FC en sus primeros años.

En los primeros años de vida del Querétaro ocurrió un hecho que dio identidad y vida al equipo, fue en la temporada 1952-1953 cuando una broma del periodista ‘Periquin’ Herrera se hizo realidad. Un aficionado llevó gallos blancos al estadio para entregárselos a los jugadores para ingresar a la cancha, en referencia a un comentario del periodista sobre la similitud entre los jugadores y los animales de granja.

Este hecho fue la referencia, nació el mito, se gestó la leyenda que con el paso de los años se ha convertido en el imaginario colectivo de una ciudad, misma que a lo largo de 70 años ha mezclado fantasía con realidad y se así se ha enamorado de un equipo que suele darle más tristezas y alegrías, pero es por esas contados momentos de felicidad que sigue con ferviente amor a sus queridos Gallos Blancos de Querétaro.