Después de la corrupción e inseguridad, el empleo, salud y educación siguen siendo prioridades de los mexicanos dónde las soluciones solo pueden ser posibles en el mediano o largo plazo y tienen una relación directa con la movilidad.
A principios de este año se publicó la encuesta origen destino en hogares en la Zona Metropolitana del Valle de México (EOD-2017). Veamos algunos hallazgos.
Solo 53.2% de los hogares disponen de vehículo y de estos 77% son automóviles. De los 34.56 millones de viajes que se realizan en un día entre semana solo 7.29 se realizan en transporte privado y tiene holograma 0 o 00 el 67.6%. De 6.6 millones de viajes en auto privado 68.3% lo hace solamente una persona, 1.5 es el promedio general.
De los 34.5 millones de viajes el 47.4% tiene como finalidad regresar al hogar, 18.9% ir a la escuela, 12% compras, 12% oficina, fabrica o taller y 2.4% ir al hospital, clínica o laboratorio. El tiempo promedio es de una hora para regresar al hogar o ir al trabajo y 30 minutos si el destino es estudio u otro propósito.
Sí un sector privilegiado utiliza el automóvil privado, culpable en mayor medida del tráfico y de la contaminación. ¿Por qué se ha convertido en un tema de guerra electoral el precio de la gasolina? ¿Por qué no hablan de subsidiar el transporte público por aumento en el precio de gasolina? Al parecer los políticos y el electorado se han enfrascado en resolver con aspirinas problemas que solo en el largo plazo pueden cambiar, por ejemplo el precio y disponibilidad de vivienda cercana a los lugares de trabajo, educación y compras.
Imagine Usted, si el 90.3% de viajes tiene como finalidad regresar al hogar, ir a la escuela, compras y acudir al trabajo, ¿por qué no crear una mejor política pública para diseñar ciudades donde estos servicios puedan realizarse sin necesidad del auto privado? Quizás sea porque la respuesta se encuentra en el largo plazo y ningún político le gustaría dejar su trabajo para que otro vea los frutos ¿Usted qué opina?